HE ESPERADO DEMASIADO

HE ESPERADO DEMASIADO

martes, 12 de junio de 2012

LA SUERTE DEL GALGO, ESTRASBURGO NUESTRA ESPERANZA



La suerte del galgo.
Miles de galgos abandonados cada año debido al irrespetuoso afán de posesión de un arma de juego o matar para algunos cazadores.
Aborrecidos por los animalistas, los galgueros trafican sin pudor con almas nobles y dóciles que solo sirven para traficar con sus vidas de las que los galqueros esperan un buen puñado de dinero a cambio de un trozo de pan y un hacinamiento en lugares irrepetibles de horror.

Comprobaciones extremas han dado como resultado que los galgos son despreciados en las pruebas y ese desprecio se traduce en dejarlo abandonado en una carretera o llevarlos a perreras de donde nunca saldrán a no ser por el empeño de miles de voluntarios y amantes de la raza que les buscan un hogar.

Son animales tranquilos, buenos y sumisos, trasmiten paz y armonía. Su bello cuerpo y estampa, no es un don para que los galqueros después de probar camadas, los deshechen porque no son negocio y terminen por traficar con los aptos. Los que no lo son, tienen un destino cruel.
Los galguero utilizan tretas para evadir los controles de chipado y censo.
He sido testigo de como les cortan el cuello para quitarles el chip, abandonarles en un lugar del mapa cualquiera y utilizar otra vez suciamente el arrancado símbolo de legalidad para ponerlo en un collar ficticio a otro galgo, que esta vez si le vale.

Madres hasta la saciedad, Reina, vino sangrando y con evidentes signos de haber tenido múltiples camadas. Ya mayor, fué torturada con esa práctica y llegó cansada, asustada y mirando el mundo con un desequilibrio total en su alma de perra paridera de factoria de pruebas de cachorros.

Reina es una más de los miles de galgos utilizados para negocio que luego puede desecharse en un contenedor de basura o en una perrera, en una carretera o en un descampado. Esos los cuasi elegidos para morir con lentitud. Los otros, elegidos para la muerte indigna del ser que ha ayudado a que el galguero se lucre de sus dones.
Otros son ahorcados, calcinados, enterrados porque ni una bala gastarán en alguno de tantos, despreciados para morir sin opción a un trozo ni de pan ni un hueso roido hasta la saciedad.
Se deshacen de ellos los galgueros sin piedad, porque son mercancia de unos meses y caducados, prefieren y adoptan la elección de matarlos.
Los galgueros no saben que es el dolor, no saben, no son conscientes. No son seres animados para dejar vivir. Los galqueros son maquinas de matar con los más crueles y sangrientos métodos para deshecho de este frágil animal con fecha de caducidad. Como si de un material no reciclable se tratara, son un objeto sin valor para ellos, son basura que nos tiran por todas las zonas de España.
El mundo entero conoce estas prácticas de muerte y el mundo entero clama por sus vidas. Los que tienen suerte podrán tener una vida de retiro digna, con un colchón mullido y un plato de agua y comida.
Ellos no pedirán perseguir liebres ni conejos. Conformaran su vida, despacio, sin correr, sin alterarse por su futuro destino.
Un galgo te amará libre de contratos caducados, libre de persecuciones, libre del hambre y el hacinamiento.
Un galgo pondrá en tu vida calma y serenidad porque ya saben que están a salvo contigo.
Algunos soñaran. Otros no podrán, porque no eligieron el gen que les daba la oportunidad de correr más allá del viento.
Su velocidad es directamente proporcional al hecho de que si patinan en la carrera, serán arrancados en vida con su destino marcado irremediablemente. Si no corres, mueres, es el lema del galquero.
 "Vida para el galgo", vida para estos animales iconos de la elegancia, la tranquilidad e icono egipcio donde su veneración ha transcurrido con el paso de los siglos en estigmatizar una raza que han denostado y desprestigiado los galgueros, esos que no trabajan en nada pero matan acertadamente y lo que es peor con impunidad.
Esperamos a Estrasburgo, esperamos endurecimiento de penas y esperamos la abolición de la caza con el amado galgo que mira su futuro con desesperanza y temor, pero nos mira a nosotros con esperanza de vida y amor.
Elena Navarro


1 comentario:

  1. Te hubiera encantado estar en la protesta de Madrid Elena, el pasado Domingo 10. Es incomprensible esta situación, qué vergüenza de país, qué asco!!! Soy gatoadicta, me gusta la naturaleza y amo a los animales domésticos, salvajes, etc, pero desde que he conocido a varios galgos y tengo trato diario con ellos, son mi debilidad!!! Es increíble que habiendo sido tan maltratados desde su nacimiento, no muestren agresividad a los humanos, lo que muestran es miedo y pánico, pero una vez que se recuperan con muchos mimos y amor, aprenden a jugar, en lo que conocen la cama y el sofá, te fastidiaste,jajaj, ya te quitan tu sitio y duermen contigo, he conocido galgos cada uno con una espantosa historia detrás y verles mejorando y recuperados es maravilloso, ojalá todos los animales que están sufriendo por nuestra culpa tuvieran la suerte de tener a alguien que les ayudara.

    ResponderEliminar